El mes pasado, el iShares Bitcoin Trust (IBIT) de BlackRock atrajo un interés récord por parte de los inversores. Con el aumento del precio del Bitcoin en mayo, el ETF registró su mejor rendimiento mensual desde su lanzamiento, gestionando entradas netas de $6.350 millones de dólares.
Según datos de Farside Investors, gracias a este aumento, los activos bajo gestión (AUM) del fondo superaron los $71.000 millones de dólares, lo que indica un mayor interés en las criptomonedas entre los inversores institucionales. El reciente aumento de la actividad se produce en un momento en que los mercados mundiales se preocupan por la inflación, los riesgos de guerra y la reanudación de los conflictos comerciales.
Las instituciones parecen ser los principales inversores que invierten en Bitcoin últimamente. Parte de la demanda es interna, ya que la cartera Strategic Income Opportunities de BlackRock ha incorporado IBIT, lo que indica su confianza en lo que ofrece esta empresa.
El aumento de la demanda de equipos de minería se produjo después de que Bitcoin estableciera un nuevo récord de $111.980 dólares a principios de mayo. El aumento en los precios de las criptomonedas se debió a la flexibilización de las normas por parte de los reguladores, en particular en lo que respecta a las monedas estables en EE. UU., y a la sensación de que los activos refugio tradicionales no son fiables.
Otro grupo de medidas arancelarias ha aumentado la preocupación de los inversores. La orden del presidente en abril de reaplicar los aranceles recíprocos ha causado una importante turbulencia en el comercio mundial y ha suscitado temores de una desaceleración del crecimiento a nivel mundial. Si bien un panel del Tribunal de Comercio Internacional de EE. UU. sostuvo que la administración había excedido su capacidad para imponer los llamados aranceles del «Día de la Liberación», un tribunal federal emitió una orden que anuló el veredicto por ahora.
En este contexto de inestabilidad económica y política, muchos inversores consideran Bitcoin como una reserva digital de valor, especialmente para protegerse de los cambios impredecibles en los mercados tradicionales.